Las leyes sobre hidrógeno están frenadas y se pierden inversiones millonarias para la Patagonia

Novedades

Desde el 2016 se han tomado decisiones firmes a nivel mundial en materia de política climática que apuntaron a la descarbonización de todos los sectores de la economía y por lo tanto hacia una transición energética liderada por las fuentes renovables.

En ese contexto, el hidrógeno como energía del futuro ha adquirido una relevancia a nivel mundial, que en un primer momento la Argentina decidió acompañar, con un Plan 2030 para la nueva fase de energías renovables.

Aquel primer impulso que estuvo acompañado de proyectos de ley, normativas y reglamentaciones que se elevaron para su discusión en el Congreso de la Nación, pero que en los últimos años han quedado frenadas sin un fundamento razonable y fundamentalmente con gran perjuicio para la Patagonia.

La región patagónica es líder en la producción de energías renovables en el país y en particular Chubut cuenta con los parques eólicos más grandes de Sudamérica. Todos los estudios de impacto del viento están disponibles para avanzar en una transformación sustentable, incluso con una planta piloto en Comodoro Rivadavia.

El escenario coyuntural muestra que sin las leyes que reglamenten, ni la seguridad jurídica correspondiente, se impide la posibilidad de millonarias inversiones para la región y para la provincia en hidrógeno verde, que ante la falta de oportunidades productivas ha visto un estancamiento que ya lleva dos décadas.

“La Patagonia tiene que ponerse de pie y vamos a exigir en todos los estamentos públicos y privados para que estas leyes avancen porque el mundo ya está mirando para la Patagonia al igual que ocurrió con Vaca Muerto y las reservas de hidrocarburos no convencionales”, aseguró el presidente de la Federación Empresaria del Chubut, Carlos Lorenzo.

Agregó que “el Parlamento Patagónico debe retomar la iniciativa para trabajar en consonancia con los proyectos nacionales, para después impulsar el debate en cada una de las provincias, y que cada jurisdicción pueda tener su legislación”.

Allí deberán establecerse las metas de energías renovables, objetivos de producción, abastecimiento local y exportación del hidrógeno.

“Es imprescindible que se pongan a la altura de la necesidad que tenemos enfrente y de la demanda potencial que ya está generando el mundo”, expresó Lorenzo.

El empresario reiteró que “se debe avanzar a paso firme y sin improvisación, ya que una mala gestión puede llevar a que nuevamente quedemos relegados y aislados del fenómeno energético que se está gestando globalmente”.

Recordó por último que durante estos años se habían dado avances tanto con el ministro de Producción Matías Kulfas, como así también con Gustavo Beliz. Dos funcionarios que salieron de la gestión nacional, lo que hizo que la propuesta perdiera el envión inicial.